Solksjaer le ofrece a Pogba las riendas del United para retenerle

Ahora que el Real Madrid parecía haber cobrado una ventaja irreversible en la pugna por los servicios de Paul Pogba, se interpone un inesperado pretendiente de última hora.

Pese a los despechos y a los desencuentros que han marcado sus últimos meses de convivencia, el Manchester United no da todavía por perdido a Pogba. En Old Trafford guardan aún dos ases en la manga: uno que requiere de la posible complicidad del galo, algo con lo que a estas alturas nadie contaba; y otro que podría romper definitivamente las relaciones entre las partes, pero que ataría al centrocampista bleu al banquillo del ManU hasta 2022.

El director general Edward Woodward, como tiene costumbre de hacer en todos sus contratos, dejó prevista la posibilidad de que Pogba intentara forzar una salida del club sin devolver a las arcas de la entidad los casi 90 millones de libras que costó. El contrato que une al jugador y a la entidad contiene una cláusula de prórroga de 12 meses de duración, unilateral, a discreción del club.

Pogba ya ha dejado caer que no le sentaría nada bien que la cláusula se hiciera efectiva. Semejante maniobra enterraría de una vez por todas cualquier buena voluntad que pudiera quedar entre el jugador y el club. La relación es ya muy tirante, entre otras cosas por la brusquedad con la que el agente Mino Raiola ha asumido la tarea de lograr una salida para Paul en este mercado de verano, pero la prolongación del vínculo mutuo en contra de la voluntad sería la gota que colma el vaso.

Esta opción sería la menos probable. El United ha trabajado diligentemente para cubrir la posible baja del francés. El alma y capitán del Aston Villa Jack Grealish se deja querer entre rumores que nadie se molesta en desmentir, e incluso se apuesta por el medio del Ajax Donnie van de Beek como moneda de cambio en un supuesto traspaso al Real Madrid, ya fuera porque los blancos tengan apalabrado al internacional holandés o bien porque la llegada de Pogba cerraría el paso a otra incorporación para los merengues en esa zona del campo.

El problema es que, aprovechando la buena disposición pública del jugador y las dificultades del mercado, el Real Madrid ha situado una oferta de salida muy baja en las negociaciones, en torno a los 70 millones de euros, bastantes menos que los 100 millones que pagaron los británicos en su día y, desde luego, muy alejados de los 150 millones que pedían desde el Reino Unido el pasado verano.

Sin embargo, según una información del Daily Mirror, los Red Devils han encontrado una nueva vía de acercamiento a Pogba. Un interlocutor que, a pesar de ser el objetivo preferido de los ataques del agente del jugador, se ha reunido con el francés para transmitirle un plan de futuro dentro de la entidad.

El máximo responsable técnico del United, Ole Gunnar Solksjaer, ha mantenido una conversación con el internacional francés para hacerle saber que, ahora que los problemas con el tobillo parecen haber quedado atrás de manera definitiva, cuenta con él como un fijo en el once inicial en vista a una eventual reanudación de esta temporada de la Premier.

En los últimos meses, en la pizarra del técnico y en los sueños de los aficionados, se ha empezado a dibujar un once que todo el mundo quiere ver sobre el campo antes de dar por perdido al ex de la Juve.

Forzados por las lesiones de Pogba, los técnicos del United acudieron al mercado de invierno y adquirieron los derechos federativos de Bruno Fernandes, del Sporting de Lisboa. El portugués se ha ganado a la grada de Old Trafford en tan solo cinco partidos de Liga y un par de apariciones en la Europa League.

Aún así, Solksjaer no le ve como un sustituto para Paul, sino como su complemento perfecto en el campo. El manager le ha expuesto a Pogba una idea de juego en la que él y Bruno Fernandes llevarían las riendas del equipo desde el centro del campo, con las espaldas cubiertas por Scott McTominay, que también ha recibido el alta médica tras una lesión en los ligamentos de la rodilla. La creatividad de esta dupla sería aprovechada por Anthony Martial y Marcus Rashford en labores de finalización.

El técnico noruego le ha ofrecido a Pogba liderar este proyecto, por jerarquía y experiencia, ya que ninguno de sus compañeros de ataque supera los 24 años. Si cuaja, el United podría tener equipo para muchos años. Paul sería la pieza clave en esa plantilla de futuro, siempre que se abriera de nuevo a negociar su renovación.

El club y el equipo técnico de Solksjaer apoyan esta idea. Michael Carrick, con el peso que le confiere su condición de jugador histórico del club y actual ayudante en el banquillo de Old Trafford, se ha dejado ver ante la prensa para aseverar: “La vuelta de Pogba y McTominay nos ofrece un centro del campo perfecto. Cada uno de ellos y Bruno Fernandes nos aportan cosas diferentes, un equilibrio y una mezcla insuperables”.

La propuesta no tendría demasiados visos de cuajar de no haber mediado la crisis sanitaria mundial que ha echado por tierra la temporada. Ahora puede sonar mucho más interesante para el galo. Los efectos económicos de la pandemia se hacen sentir ya en el fútbol mundial. Al igual que el Real Madrid se ampara en la situación actual para recortar severamente su oferta inicial en las negociaciones con el United, es muy probabe que Pogba no vaya a encontrar ya ningún club que acepte pagarle las astronómicas cifras que cobra en la Premier, del orden de las 300.000 libras semanales. Ni en la capital de España, ni en Turín, ni en París.

Una posible reanudación de la Premier League le daría a Solksjaer la oportunidad de venderle al jugador y a la afición, ya sobre el verde, un proyecto de futuro en el que podrían seguir encajando piezas como Jadon Sancho, que parece el objetivo prioritario para los de Manchester.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Bonos de apuestas deportivas

¿Tienes más de 18 años?

Antes de empezar, confírmanos tu edad